Esta concesión finalizó en enero de 2010 y consideró la construcción de un nuevo edificio terminal de pasajeros de aproximadamente 6.060 m2, con dos cintas transportadoras de equipaje y tres puentes de embarque, para atender a 500 mil pasajeros al año.
El contrato también incluyó la construcción de una nueva vialidad de acceso y circulación al interior del aeropuerto, con su respectiva iluminación y señalización, la ampliación y mejoramiento de la zona de estacionamiento de vehículos, un terminal de carga, una planta de tratamiento de aguas servidas y una nueva subestación eléctrica.
La obra fue relicitada y en la actualidad está vigente la segunda concesión.